Soy humana.
Puedo dar varios sentidos
al término:
tengo un cuerpo, con brazos,
piernas, cabeza, arterias, venas,
es decir, con todos
los atributos.
Bueno, sí,
me extrajeron una muela,
¡siempre algo falta
o sobra o se pierde!
en general,
puedo decir
que estoy bastante
"completa",
si a eso me refiriera
cuando hablo de ser o no ser
"humano";
hay otras cuestiones.
¡hay otras cuestiones!
ser humano
implica sensibilidad,
empatía, ¡sentimientos!
¡que no se tema a los sentimientos!
los sentimientos,
su expresión, su demostración,
su exhibición sin prejuicios
de eso que decimos
o ubicamos en el corazón,
en el alma,
como se prefiera,
es lo que nos convierte
o demuestra que somos "humanos";
por eso, si alguien daña, desilusiona,
lastima en la forma en que sea
a otro, a otros
se dice que es "inhumano",
¡que pena que algo
que el propio hombre, persona
ha creado,
nos instale
en el planteo ético-existencial
de llegar a preguntarnos
hasta qué punto somos lo que somos!
si eso que nosotros mismos,
-o algunos-
inventaron, inventan,
puede con nuestras emociones,
puede con nuestras lágrimas
cuando algo físico, espiritual o afectivo,
nos lastima;
La IA
no sufre, no padece, -acudamos o no a ella-,
se asemeja, digamos,
a la Wikipedia,
aunque con mucho más material.
¡nos informa!
como un manual de instrucciones,
como un súper diccionario enciclopédico:
¡se volcó un montón, un montón
de información
para que lo haga!
no sé si vieron la película,
alguna de las de la saga de "Terminator":
supongo que sí
o tienen idea de qué se trata.
La máquina, como los propios guionistas
hacen que los actores "humanos"
denominen a un muñeco
representado en principio,
por un único actor,
luego,
surgen diversas variantes;
pero vuelvo a lo que pretendo decir:
la máquina no siente, no se emociona,
le pregunta, entre otras cosas, al personaje de John Connor
qué es eso que tiene en los ojos,
refiriéndose a las lágrimas,
pues se expresa en un lenguaje aprendido,
instalado
y el joven Connor
le explica, le modifica
esos términos
para que se "parezca" a las personas,
para que adopte un lenguaje creíble,
confiable.
De eso se trata.
¡Somos humanos
y no necesitamos que nadie certifique nada
al respecto!
la computadora que estoy utilizando
está escribiendo lo que está en mi cabeza,
en MIS pensamientos;
no elige las palabras,
no crea por sí sola,
¡yo determino qué tiene que componer!
¡yo soy su mentora,
por así decirlo!
no delinea ninguno de estos textos
sin mis indicaciones;
en ningún momento
debería dudarse
con respecto a estas cuestiones;
se es humano
cuando se ve a esos árboles,
cerca del barrio
donde vive mi mamá, por ejemplo,
frondosos, de un verde increíble,
creciendo, mutando,
plantados en forma descendiente,
maravillosos,
perfectos,
porque alguien, un ser viviente
los ubicó de ese modo;
la naturaleza
claro que surge por sí misma,
mas no hay ninguna máquina
que coloque una semilla, un brote,
que cuide
un parque,
un jardín,
un bosque,
lo que fuera;
¡Gritemos a este mundo confuso
y confundido!
¡somos humanos, somos sintientes!
nos planteamos cosas, elegimos,
nos enamoramos, nos desenamoramos,
hacemos, aportamos,
nos reímos y lloramos
al mismo tiempo;
nos aniquila
que alguien a quien consideramos amigo, amor,
lo que fuera
nos trate mal, nos insulte,
nos lastime del modo en que sea;
¡porque somos de verdad!
y ser de verdad
debería enorgullecernos,
día tras día;
¡mucho más en este tiempo
en que poseer
resulta más importante
que ser!
somos esto.
Hacemos lo que podemos
por alguien, por muchos.
Usamos la tecnología,
¡la usamos!
para expresar
lo que vive en nosotros,
lo que estalla de nuestros sentidos.
Pero que quede en claro:
no son los dispositivos.
No es un sitio,
un circulito
"pidiendo" que lo consultemos.
No es un montón de información
quien nos acompaña, quien nos da ánimos,
¡quien nos dice o nos dirá qué hacer en cada situación!
habrá quien lo haga,
habrá una persona, un allegado, un conocido;
¡habrá un amigo!
y sin dudas,
el mejor amigo que podríamos, podemos tener:
¡nosotros mismos!