lunes, marzo 20, 2023

Supervivencia crónica

 Sin vos,


 sin una miserable, adorable

 palabra,


 noticia, información;


años

pasaron ya;


ok lo de la resiliencia,

lo de soltar y demás;


lo entiendo,

juro que lo entiendo;


pero a veces,

hoy, digamos,


no doy más;


necesito el estímulo

siquiera, de saber

que estás en alguna parte,

haciendo algo, lo que fuera,


pensando


cada mil años

en mí;


necesito

esas dos, tres palabras


o más, claro,

¡las que quieras!


-las que puedas-;


no demando

siquiera,

tu presencia,


aquí, al lado,

en la otra cuadra,


a unos pocos metros,

a unos pocos kilómetros;


¡a miles

de kilómetros!


tan solo

un aviso,


una pregunta, 

un feliz... lo que se festeje:


"feliz otoño"

 podría ser 

 mañana;


no importa -o sí-

pero no importa,


no poder,

no intentar

evitar


sentirte en lo más profundo;


no poder vivir

y tener que hacerlo


por mí, por ellos,

por lo que fuera;


urge


seguir remando

en este mar

tenebroso,


frente a las olas más imponentes;


bajo un estado

digamos, de "supervivencia crónica";


sufriendo

por lo que seguramente

no tiene sentido sufrir;


llorando

lágrimas que ya son añejas


aunque

todavía sigan conmigo,


ocultas


detrás de la mirada

que le pongo al mundo,


aunque ellas insistan,


aunque, a solas,

las deje brotar


y no paren

¡no paren!


tengo que escribir

esto,


es mi otra manera

de decir,


de sentir,

de palpitar...te;


asusta


esta "sinrazón" sin arreglo,


no poder escapar de los amenazantes

fantasmas;


¿los del pasado lejano?

¿los de hace pocos años atrás?


no sé


pero duele


y no tengo a nadie

más que a esta pantalla blanca,

 

toda ausencia;


¡aunque a veces,

surjan presencias!


aun desde lejos

o no tanto,


me acompañan


y hacen que esto 

todo lo demás, -y lo de menos-


justifiquen


estos simples,

cansados


versos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cristina Del Gaudio

Seguidores