lunes, agosto 21, 2023

Si estuvieras

 Si estuvieras


 en estos pequeños 

 martirios cotidianos;


¡si estuvieras!


en voz, en letras,

¡en presencia!


quizás,

tu abrazo lo convertiría todo;


Aunque sé bien

que a esta altura


debería bastarme

con mi propio abrazo,


ser yo misma

quien me dijera esas palabras precisas


para que todo o algo reinicie;


para que no opaque mi día

con ese, con cualquier conflicto;


para que recuerde

algo muy importante:


cuenta cada segundo,

cuenta cada minuto;


si me lo repitiera

con frecuencia,


si dejara de repetírselo a quien sea

y me lo auto-destinara,


probablemente


no estaría añorándote

ni a ningún otro,


convencida


de que solucionarían

cualquiera de mis dificultades.


O al menos,

las comprenderían,


me comprenderían.


Resulta

que una vez más


estoy huyendo 

de mis responsabilidades,


arrojándote y también a algunos más,

-incluso, a algunos que ya no están-,


mi ocasional o no

más, menos pesada mochila;


claro,

es mucho más cómodo

apoyarse en quien sea;


pues, encarar el devenir de la existencia,

ponerle el hombro


cuesta,


agobia,


da miedo.


De todos modos,

al parecer,


nadie vendrá a levantarme el ánimo,

a decirme qué debería hacer

qué decisión tendría que tomar.


Solo a mí atañen

mis enredos preocupantes


y debería dejar de preocuparme

y ocuparme


en verdad.


Muchas veces

nos confundimos.


Depositamos

ideas equívocas en otros,


los cargamos

con una extenuante problemática


que es solo nuestra;


y nos enojamos

si pretenden quitársela

o muestran desinterés;


los consideramos

hacedores de una especie de milagro:


el de resucitarnos,

el de levantarnos del sub-mundo,


el de devolvernos

esa energía en caída ¿libre?


por suerte,


esto me sucede

alguno que otro día,


o simplemente,

se trata de una fracción


y pasa.


Como todo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cristina Del Gaudio

Seguidores